Ocurrió en la escuela 6, en la mesa número 63, cuya presidenta era la religiosa de San Roque. Dentro del cuarto oscuro, debajo de la mesa donde estaban las boletas de Unión por la Patria, dejaron un recipiente con maíz. «Dicen que eso es para una brujería», comentó Cecilia Macchia, fiscala general en ese centro de votación.